El silencio se vio rodeado de aullidos,
moribundo y perseguido se fue para
el norte a ver si encontrava aquella
nieve donde nadie se arrimava.
I nosotros nos quedamos en esta
tierra seca y oxidada a cantar victoria
y sufrimientos ,dormidos en un adios
inmovil.
El dolor penetro con acero de espada
derrunbando hombres con sus sueños
carcomidos,con sus manos estendidas,
con la sangre a borbotones.
I nosotros no hicimos nada, no repartimos
el pan ni tocamos la patria con la bandera.
Fue todo mui sinples , mui sencillo dimos
vuelta en retirada a buscar otros lugares
pues asi viven los hombres que ensucian
el horizonte.
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