Táctos,
añelos y lenguas que se encuentran;
Hasta
que se haga el infortunio;
La
vida sabe que no puede conmigo, pero
lo
inesperado me hace sangrar humildad;
¿Y
cuanto tengo?
¿Sobró
alguna cosa?
No
sé si tuve garantias, no sé si cuando estabas
quieta
pensavas en matarme, o alguna manera
de
hacerme añicos.
No
era una carrera, no era insistir en ser humano;
Aspiraba
un lugar para perder el contacto,
Era
imposible darte sentido;
Era
imposible darme sentido.
¿Y
diós nos protege?
¿Donde
está?
Talvez
en algun restaurant, conmovido con
nuestras
flaquezas y docientas hojas dactilografadas
con
nuestros pecados.
Havia
trivialidades y mal humor;
Havia
celos en un proceso irreversible, pero cuando
hay
confort algunas cosas se soportan.
Era
necesario un puntofinal;
Era
necesario lo imprevisible, y solo un poco de
tristeza
inevitable no parecia mal.
¿Y
al final donde escondieron la llave de ese reino?
¿En
el mismo lugar donde escondieron el olvido?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario